Melissa Díaz, operadora de La Rolita, comparte los resultados y aprendizajes de la participación en el evento “Género y equidad social en electromovilidad” que fue organizado por C40, ICCT, WRI México y CGI, que tuvo como invitada especial a La Rolita.

Para ser operadora de La Rolita Melissa recorrió un largo camino, muchos años atrás inició su aprendizaje con la conducción de motocicletas, para luego animarse a la conducción de vehículos particulares y taxis, prestando así el servicio de transporte. Pero no sería hasta su encuentro con el proyecto La Rolita, que asumiría el reto de manejar vehículos de transporte público de grandes dimensiones.

Se inscribió entonces al programa de eco-conducción, y tras un año de aprendizajes y superación de retos ingresó como operadora de La Rolita, vistió su uniforme y hoy pone a rodar los buses 100% eléctricos con un alto compromiso de servicio que se refleja en el trato amable a los usuarios, la
motivación constante a sus compañeras y la disposición permanente para aportar en las acciones que desarrolla la empresa.

En este camino, asumió un nuevo reto el pasado 15 de marzo, frente a invitados de Asía y Londres, junto a fabricantes de automotores de la talla de Volvo, la operadora Melissa Díaz presentó a La Rolita en el evento “Género y equidad social en electromovilidad” destacando su gran aporte al planeta, dado que ya son más de 5.000 las toneladas de CO2 las que se han dejado de emitir en la capital del país, gracias a su flota 100% eléctrica.

Melissa también contó que los invitados al evento estaban muy interesados en conocer su proceso de contratación y el del resto de mujeres que hoy están en el sector del transporte público de la ciudad, al igual que los detalles sobre los horarios de operación, y cómo estos se conjugan con sus vidas, historias y responsabilidades personales.

El funcionamiento de la operación y las características de la flota, de acuerdo con Melissa, fue otro asunto de interés para estos invitados.

Y es que lo que más ha llamado la atención en el mundo, es el encuentro de dos grandes objetivos de desarrollo en un mismo proyecto, a saber, el trabajo por la equidad de género y la construcción de una movilidad ambientalmente sostenible. La Organización Internacional C40 también resaltó el excelente clima laboral percibido en su más reciente visita al patio de operación de La Rolita, y el hecho que Bogotá le apostó no sólo a tener una de las flotas eléctricas más grandes de Latinoamérica, sino también a que esta sea operada equitativamente por hombres y mujeres.

Este evento representó para La Rolita un paso más en su posicionamiento a nivel internacional como un proyecto sostenible que piensa una nueva movilidad a la altura del siglo XXI. Y para Melissa Díaz se convierte en un nuevo reto superado, que le entregó aprendizajes sobre el proceso necesario para la estructuración y puesta en funcionamiento de una operadora pública de transporte con flota 100% eléctrica, que se suman a los ya obtenidos en el cuidado de los buses y el manejo adecuado para mejorar el rendimiento de las baterías.

“Disfruto mi trabajo porque me permite sentir satisfacción al saber que ayudo a los demás a llegar sanos y salvos a su lugar de destino.” afirmó Melissa.